Es domingo 23 de marzo de un año que conmemora a las personas con discapacidad y todos estamos hipnotizados por la pequeña caja boba, siendo testigos de cómo 2 chicos se alzan con el primer lugar de canto en un programa concurso de talentos a nivel nacional y partícipes de todo el despliegue a lo largo de las presentaciones, nos parecen totalmente justificadas las lágrimas, y los merecimientos son de nuestra mayor empatía , luego nos enteraríamos que aquel programa fue la pionera a nivel nacional y toda sud-américa, llegando a extenderse a países como México y Venezuela, los conductores, unos nóveles Paul Martín y Patty Wong daban muestras de sus dotes como tal, siendo el destino quien luego los pusiera a cada uno en el lugar correcto, o es lo que nos quisieron hacer creer; sin embargo aquella algarabía superaba la pantalla y se trasladaba a todos en casa, me recuerdo saltando y abrazando la multitud cual gol de Paolo frente a Colombia (vitoreando aquella frase que nos quedará marcada de por vida ¡LA TOCÓ, LA TOCÓ!) contagiado por el jolgorio del momento y aprovechando aquello que es escaso, como en tantas familias, el afecto expresivo y desbordante, sin siquiera saber muy bien el por qué y sin muchas ganas de indagarlo, el momento se vivía y había que degustarlo.
Mis recuerdos desgastados
llegaron a refrescarse hace un par de años al enterarme que aquellos muchachos
tenían su origen en la Selva del Perú y que sus brazos remaron mucho contra
esas olas que el destino se ensaña en poner, para quienes buscan una
oportunidad desde fuera de esa burbuja llamada Lima, 2 provincianos con
un gran talento y ambiciones de juventud de comerse el mundo, un reducido mundo
peruano. De tanto indagar no encuentro en la actualidad registro alguno de tal
acontecimiento, ni siquiera un capítulo completo del despliegue durante el
proceso del concurso, mis recuerdos pueden ser un tanto viciados si de
objetividad se trata, lo único que logré encontrar es una imagen en donde se
muestra a nuestros personajes captados por las cámaras en unos escasos
mili-segundos:
José Antonio Orejuela y John Alex Aranda son dos pucallpinos que iniciaron su carrera musical en su ciudad natal a escasos años de la apertura de los 2 mil, conformaron un trío de cantautores y su valoración se proyectaba de a pocos, en una primera aventura en la capital lograron vincularse con una disquera reconocida, sin sospechar que la informalidad, sumados los despropósitos del estado en re-valorar el arte nacional disfrazarían su primer gran fracaso con una descripción que ya tenía forma y estaba en todo su apogeo, la piratería; con sueños truncados y llevados sobre hombros había que generar la retirada flameando banderas de paz y asimilando las críticas de quienes gozaban del éxito de sus predicciones anticipadas.
Así es como FUEGO LIMPIO, grupo conformado ahora por el dúo, nace, como un reclamo al destino, rebelándose al fracaso y retando sus propios fantasmas, en busca de aquellas oportunidades perdidas; no es hasta el 2003 que logran su máximo apogeo haciéndose ganadores del concurso de canto CAMINO A LA FAMA acontecimiento que marca en ellos un punto de quiebre y cosechando desde entonces numerables presentaciones y entrevistas. En agosto del siguiente año les llegaría la oportunidad de interpretar la canción que los llevaría a ser escuchados ya no sólo a nivel nacional, debemos rescatar las grandes producciones que en aquel entonces promovían algunas industrias y que se encargaban de generar contenido en nuestras pantallas televisivas y vaya que connotaban un hambre de hacer productos con potencial de exportación, esta no era la excepción de la telenovela LUCIANA Y NICOLAS, interpretada por Christian Meier y Ana de la Reguera, que fuera transmitida en más de 20 países vía UNIVISION, además de contar con un staff de lujo, como director nada menos que el reconocido Grazio D'Angelo, la banda sonora no podía ser la excepción, así es como nace la canción REGALARTE UN BESO que fuera de autoría del catautor Guillermo Lobo, los arreglos del no menos reconocido Miguel ‘Chino’ Figueroa y la colaboración del cantante Willy Noriega, nada menos, las crónicas de entonces anticipaban una acogida incalculable para los jóvenes cantantes.
Como en gran parte de personajes de éxito, llegan momentos de pausa y despojo, el final para una agrupación juvenil con grandes proyecciones cerró su corta carrera el 2005, tomando cada uno caminos diferentes y siendo testigos de cuanta agrupación musical pertenecieran luego.
Siendo Pucallpa o la selva, en un contexto más genérico, una región con tan pocas oportunidades, venimos a encontrar historias como esta y es que las condiciones que presenta un país como el nuestro, no cuenta con un camino más seguro que el del emprendimiento y las ganas de salir adelante, de salir de ese pozo de condicionamientos a las que muchas veces esta sociedad nos pretende asociar; dos jóvenes artistas que lucharon por sus sueños y encontraron la oportunidad de medir sus esfuerzos en un concurso o reálity, como ahora lo conocemos; quizá en la actualidad este método haya quedado sin vigencia y bastan ejemplos de quienes ganaron concursos y no hayan visto su frutos en el apogeo de masa, así mismo la experiencia viva de la actual cantante chilena Paloma Mami quien tomó la decisión de renunciar a uno de estos programas y de incursionar en formatos actuales como lo son las redes sociales en donde ha encontrado un refugio muy rentable y el reconocimiento de su arte en gran medida, ya lo dijo en cierta oportunidad un guerrero de sangre dura "No hay nada imposible para aquel que lo intenta".
Esta debe ser una clara muestra para la juventud actual de cómo el esfuerzo puede hacer que las metas se cumplan y que los grandes fracasos sirvan para reinventarnos y tomar impulso para generar mayores oportunidades.
Pdt: El dúo FUEGO LIMPIO ha retomado actividades luego de 17 años de separación, aspirando los éxitos pasados y prometiendo propuestas frescas, desde esta humilde tribuna les deseamos los mayores éxitos.
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